FANTASIA RENOVADA
Mis recuerdos, de esta aprendiza de escribir, algunos de la niñez se mezclaron, en un momento determinado de mi existencia, con los miedos que cada uno llevamos, pero la fantasía se impuso y unida a aquellos años en los que viví en mi pueblo, pocos pero ahí están, más los que disfruté de adolescente, disfruto, y espero hacerlo por tiempo, me impulsó a sacar la imaginación que llevamos. De aquél periodo comenzaron a brotar, como el agua del manantial, las ideas que voy plasmando en novelas y relatos.
Algunos de los catorce relatos son más intimistas y están inspirados en el entorno de mi pueblo, Buendía o Diembu, como en ocasiones aparece en mis escritos, porque no sería nada sin mis raíces; “El Viaje” y “El Vuelo”, son, tal vez, lo más intimistas inspirados en el entorno de Buendía, como también “El Bosque no oculta el sol” o “Encierro. El Miedo liberado”, historia ficticia basada en los encierros que antaño se realizaban en mi pueblo.
En algunos momentos del pasado me aferré a la fantasía, llevándome a superar los desencantos y decepciones en que me encontraba, y de aquellos momentos salieron: “En el cielo no hay dolor”, paralelo que divide lo real con lo irreal y abstracto; “La Trilogía: Salvado. Diembu y La Romana”; “Buscando su destino”, “Camino de fuego y luna” y “El Puente”.
Es una gran satisfacción tener entre las manos nuestras fantasías imaginarias, plasmarlas en un libro y poder hacerlas llegar a quienes se atreven a leerlas y disfruten con ellas. Es lo único que aspiro y deseo.